10/04/2012

Con un buen título se tiene mucho trecho adelantado

Capítulo XXVIII

en donde se viene a contar cómo Rodrigo Azagra, hombre de apocado natural, de caída agradable aunque prontos raros y afilados, a la pregunta de un pariente cogiole mal cuerpo y le fue a romper la crisma, teniendo por tal que huirse a tierras sarracenas, donde cortejó a una dueña mora, casó con ella al modo de ellos, y pasó tiempos de dicha, hasta que repitiósele el mal cuerpo por un preguntar de su consuegro, y le dio la contestación de matarlo a puntapiés, viéndose empujado a escapar rumbo al sol naciente, donde le entró por el ojo derecho al mayor cacique de aquellas esquinas, cosechó su querer y apreció, escaló al ministerio de privado, y vivió en abundancias de lo mejor hasta que una pregunta de la favorita real trájole de nuevo el mal cuerpo, y la descabezó a sañudos mordiscos, provocando la cólera de su señor, y otra fuga ya a páramos yermos y sin Dios de hombres, donde se acomodó anacoreta y medio místico, aprendió a vivir desnudo, y a comer raíces y lagartos, hasta que loco de solo, y de tanto hablarse a sí, atinó a preguntarse alguna incomodidad sobre la que este cuento no da detalle, arremetiole su postrer mal cuerpo, y se ahogó del cuello

Pues eso.




.

6 Comentario:

Jesús Alcalde dijo...

Antero... jajajaja Antero... Hostia puta, Antero, que te quiero.

David Mariné dijo...

por fin encontró la cordura entre tanta soledad.
abrazos.

Jesús dijo...

Mira, algunas de tus últimas entradas no me han gustado, pero esto me ha encantado.

Por la forma, que es "tuya" pero del mejor "tú", o al menos el que más me gusta a mí, y por el fondo, porque en ese párrafo (título) hay muchísima historia, tantos matices como pueden caber ahí y vaya, que da para epopeya de quinientas páginas.

Te saludo y te aplaudo, antero.

Manuel Marcos dijo...

Muy bueno Antero, este descaro tiene su qué. Humor directo, carajo, ya era hora.

Carolina Badia dijo...

Acojonante! ese título debería ser portada.
Un beso

Juan José Irizar dijo...

Me voy pensando en un titulo para la próxima entrada. Me ha dejado un regusto a envidia el tuyo.
Saludos