12/21/2012

Mírate a los ojos porque tienes versos

«—¿Y tú?, ¿de dónde eres?
—De donde la carne. No creo en los sitios»

Versos a kilos
a carne
viento que nos pesa adentro.

¿Cómo documentar el sentido de una raza al cipote que se te pinocha cuando la mulata del 3ºB te da fuego?, ¿cómo concretar los pigmentos de una bandera, o las señas de identidad de un país, al coño que te saliva cuando el cateto charnego te piropea a tumba abierta?, ¿cómo irle con clavadas, mareos y estraperlos a lo que latido a latido declina, fallece, se sabe vivo?
Hazte lo que eres,
lo que te pide uso
y poemas;
lo que se te pudre
de vivo viviente.

Y cuando se avecine la hora de las multitudes,
cuando desembarquen en riadas,
con sus banderas-estribillo de canción del verano,
con sus odios caramelizados,
y sus razones infladas de helio
y su maldita hambre amaestrada,
cuando desborden y se apropien de la tierra
a la que gangrenan;
allí,
en aquella cornisa,
recostado contra la luna que se les escapa
saca tu viento
y ondéate.

Que nos atisben desde sus termiteras insignificancias
inalcanzables,
arrogantes,
y sabios.






Dedicado a Felipe, María Góngora, Beatriz, Jesús, Esther, Elena, Sarco, David, Jesús Alcalde, Carolina, Lechatnoir, Mothman, Miss Desastres, Manuel, Capitán Placenta, Enrique, Mareva y a todos los que de tanto en tanto echáis un ojo por aquí.

En este fin del mundo que —como cada Navidad— se avecina, deseo que los pellejos se os aceiten de sonrisas y pringuéis mil, en cada roce, caricia, abrazo; que los buenos días se apelotonen a las puertas de vuestros hogares y entren sin requerir timbres, de la confianza que os han cogido; que folléis poco, pero siempre, con premeditación, delito y alboroto, y si puede ser, con más querer que amor, que seáis ricos aunque el dinero sea de otros, y que nunca, nunca, nunca, pero nunca, necesitéis plantearos ser felices.

Feliz fin del mundo. Ha sido un lujo conoceros.
Antero.

11 Comentario:

Le.chatnoir dijo...

Juer casi, casi has conseguido que me tiemble el labio...
El lujo es nuestro por poder leerte!!

Hoy besos no, hoy un besazo!

S. dijo...

Antero!

David Mariné dijo...

no termina el mundo, comienza una nueva era Antero, te lo aseguro.
soy un puto afortunado al poder leerte.
un abrazo de los gordos y muchas gracias.

Jesús Alcalde dijo...

Para mí eres ya un amigo, Antero. Un buen amigo. Con eso te lo digo todo, seguro sabrás entender...

Muchas gracias, viejo. Eres un fenómeno.

Mis respetos.

María Góngora dijo...

BUffff...

sólo tú podías escribir un poema así el último día.

Gracias por tenerme presente. Sabes que estoy aunque casi siempre en silencio.

Besos y abrazos. Feliz lo que sea, pero que sea feliz.

Capitán Placenta dijo...

Seres en potencia, siempre en potencia.
Qué bueno eres, copón.
Y qué importante tu letra pequeña...

Gracias por compartirte en este mundo de bastardos. Felicidad a cántaros.

Un abrazo!

miss desastres dijo...

La poesía se abre paso en ti
te tiembla y se desborda
siempre has sido un torrente

No dejes de ondearte nunca

Maldita sea, qué hermoso...

Beso

Beatriz Boca dijo...

Anterín, nos salvas del fin del mundo con tus versos. Tú siempre grande y amigo. Que la poesía sea siempre viento que nos pesa adentro, como tú, viento. Te quiero.

Mothman dijo...

Se pierde mi aceitada sonrisa en esta madrugada de supervivencias. Que los idus nos sean propicios a todos y todas.
Abrazos

Carolina Badia dijo...

Deseando que el 21 explotara blogger por los aires llevandose con su onda expansiva todas esas ramas negras que arañan con plañideras copias y burdos originales la alegría del tonto que fue ignorante...pero no, aquí sigue. Todo sigue igual, todo sigue macerandose como mierda en caldero. Y aun así digo: gracias universo por poner en mitad de este fango al Sr.Antero que tiene unas palabras dignas de Moises para todos los que casi lo merecemos.
Un beso inmenso Antonio y mil gracias por pensar en nosotros

Manuel Marcos dijo...

Un abrazo enorme, Antero, sigue dándonos este verbo vivo de vida, con la gracia como un llaga que rie, valiente y guerrera, despreocupada. Conocerte ha sido una sorpresa de las que no se olvidan nunca, amigo.
Salud
Manuel