11/16/2013

¿Oyes al ruiseñor?

A estas alturas de la película
con nuestras cicatrices y kilitos a cuestas
que nadie venga a citarnos párrafos de autoayuda
porque todos sabemos ya donde reside el amor.
Y que
si lo agarramos
¡patapam!
lo matamos.

Y entonces
niñatos malcriados,
repipis y tiranos,
pataleamos berrinches exigiendo que un adulto nos absuelva,
nos legitime la trastada
y nos consienta la esperanza de que no lo asfixiaremos,
que atenderemos sin abrir la jaula
la próxima vez.




.

5 Comentario:

Sonsoles dijo...

No era un alondra? ;) Ainss q nerviosita q me ha puesto la foto _ no lo puedo evitar, tengo 2 de esos igualititos q siempre anda volando por el salón. A uno hace un rato q no le veo, por cierto ;^P _ y tu poema, descolocas niño, y tb huele hoy a pólvora por aquí, a eso y a arrullitos en forma de cariño.
Como me gusta q la gente se quiera ...
Besos!

PMPilar dijo...

la persuasión de desaconsejaba una y otra y otra y otra y mil veces desoir al oriol de último turno.
cabalgaba una alondra mañanera. esa que no es, 'semos'

abrazo con besos

calmA dijo...


A la paella con él, Antero...

Y al amor qué le den mucho..."AIRE".

Beso nada apretado (en esta ocasión)

miss desastres dijo...

el amor, si bueno, se agarra solo

Sarco Lange dijo...

El amor está dentro de un plato hondo, abajo nadan los vellos queriendo ser naves espaciales, el hombre mira a la mujer, le pregunta cosas, la mujer no le responde nada, se saca las uñas con los dientes y se mea mojándose las rodillas. El hombre se agacha, se las limpia, se abre el pecho, caen al suelo empapado sus órganos fundamentales, pasan los aviones, hay unos que van de ida y otros que ya nunca vendrán de vuelta, Antero mío...