11/05/2013

Un poema de jamón que le gustaba a Ali

El poema que le escribió en su salada barriga
en aquella playa de Roses
era
como cualquier poema de amor que se precie
malo
intransferible,
y directo a timbrar el clítoris del corazón.

Ella
que leyó en carnes lo que le oyó
guardó silencio sobrecogida
a la espera de que el firmamento
recuperara los neones rotos de costumbre
y se despojara de tanto sueño capaz
de bolsillo.

Pero como transcurrían los minutos
y el despertador no sonaba,
          veloz hembra iracunda,
lo aferró por los cabellos
y le lamió de futuro los labios.
«¡Te voy a poner en la gloria, cabrón!»




.

6 Comentario:

Sonsoles dijo...

Si es que por un poema se pueden llegar a perder las llaves de casa, la ropa interior, la exterior, el sentío, el dinero ... y exactamente por ese orden ;P
Te lo digo yo, q lo sé, además de buena tinta ...
Besos

PMPilar dijo...

por menos que poema
decido se me escape
un cachico de exlujurias.
luego vuelven todas una a una
hechas alma flor de un día, 'semos'.

[ed. de bolsillo]

Besos

miss desastres dijo...

—como cualquier poema de amor que se precie—
malo
intransferible
y directo a timbrar el clítoris del corazón.

mira que eres puñeteramente lírico

besos enormes

calmA dijo...

Mira Antero, yo me peto contigo, eres... eres... ufff.

Pero me como cada verso que escribes, porque no se pueden cocinar más ricos, de lo que tú lo haces... pero sí... me parto Antero, vaya güasa que tienes.

Esos patitos... madre mía...

calmA dijo...

Quería decir esos peaso Cisnes jajajaja.

Jorge J. Molina dijo...

Hay poemas complacientes, poemas impostados, versos precocinados y adjetivos que se visten de etiqueta en ridículas fiestas de pazguatos o charangas populares.Pero este poema, tus poemas, son otra cosa, aquello que no puede dejar de ser esa otra cosa que no acepta concesiones. Enormes versos los tuyos.